Padres Solteros


Al encuentro del instinto paterno

La paternidad es un rol que proporciona fortaleza y bienestar físico, mental, espiritual y emocional a los hijos; pero a su vez, es una tarea que implica mucha paciencia, tolerancia y decisión, sobre todo, cuando es asumida por completo por uno de los progenitores.

Para muchos hombres al inicio, puede significar una labor difícil y agobiante, pero poco a poco van descubriendo que es una tarea fascinante, desafiante, interesante y muy satisfactoria para sus vidas. En estos últimos tiempos los padres mantienen una relación más cercana y abierta con sus hijos en cuanto a la expresión de su paternidad. Vemos que los padres actualmente, asumen tareas domésticas y de paternidad con mayor libertad que en tiempos pasados.

Actualmente las cifras de padres solteros van en aumento y puede suceder por múltiples circunstancias: el divorcio, la emigración por motivos de trabajo, la enfermedad o muerte de la esposa, etc. Según la oficina de censos realizados en Norteamérica hay 11.9 millones de padres o madres sin pareja en los y el número de padres solteros creció un 25 por ciento en tres años a 2.1 millones. Estas estadísticas indican que ser padre sin pareja ha llegado a ser una realidad para la sociedad.

Estos cambios radicales generan en los padres un nuevo sentido de su paternidad, algunos psicólogos hablan de la construcción del instinto paterno, como una nueva forma de relacionarse con sus hijos. El instinto materno es un concepto que siempre fue atribuido a la mujer como las únicas personas que poseían una comunicación y sensibilidad exclusiva con los hijos desde que salían del vientre materno.

Pero diversas experiencias de padres que han tenido que asumir solos su paternidad cuentan que aprendieron a cambiar pañales, cantar canciones de cuna, reconocer el llanto de sus pequeños cuando tenían hambre, sed o frío, así como el poder interpretar su cansancio, o sus diferentes estados de ánimo, creando así un lenguaje común entre los hijos y él. Se dan cuenta también que la expresión de sentimientos a través de palabras de aliento o gestos fortalecen aún más vinculo entre padres e hijos. Del mismo modo, los niños, aprenden a estar atentos a las necesidades y requerimientos de este padre.

Y como estos padres no cuentan con alguna pareja para poder compartir las labores de casa y de los niños, puede que lleguen a frustrase y a estresarse, con más facilidad, por ello es importante considerar algunos tips que los ayude a continuar con el reto de seguir ejerciendo su paternidad de manera exclusiva:

Recuerde que usted no es superman, ni todo lo puede usted, los super héroes con super poderes, sólo existen en las películas de ciencia ficción y casi nunca se les observa ejerciendo las tareas domésticas y de paternidad; es casi seguro de que si lo hicieran, estarían tan igual como usted, agobiados y estresados o con ganas de tomarse unas merecidas vacaciones. El único poder que lo mantiene motivado para ejercer su rol de padre es el amor que tiene por los suyos y eso generará en usted una fuerte motivación para hacer las cosas bien.
 
Usted es la autoridad y como tal debe guiar a los más pequeños en base a límites claros y precisos, no cometa el error de decir, “como no tiene mamá, trato de darle todo lo que pida, así no sentirá su ausencia”. Lo único que conseguirá es darle tanto poder que luego usted no podrá con ellos. 


Son un equipo, si bien es cierto usted ha conformado una nueva manera de ser familia, cada uno debe tener sus roles y funciones muy establecidas y definidas desde la edad que cada uno tiene y de esta manera colaborar con las cosas de casa, si no tiene apoyo para ellos y si lo tuviera, darle a los niños responsabilidades con sus propios espacios como el arreglo del dormitorio, del baño, de sus cosas escolares, etc.

Solicite ayuda, sobrecargarse de responsabilidades lo llevaran prontamente a la frustración y el estrés, busque dentro de sus amistades o familiares quien puede apoyarle en esta tarea de atender las labores domésticas y sobre todo con los tiempos de ir a buscar a los chicos al colegio o supervisar tareas, o llevarlos a otras actividades fuera del colegio.

Escuche y dialogue siempre con cada uno de ellos, no es lo mismo dar instrucciones y orientaciones en conjunto que mantener una conversación particular y en intimidad con cada uno de sus hijos. Ellos deben sentirlo cerca y que usted sabe lo que pasa en sus cabezas y corazones. Esto incrementará su autoestima y confianza de ellos hacia usted.

Si tiene pareja no se sienta culpable, es importante que pueda usted definir su situación, si está dispuesto o no a rehacer su vida, y de ser así, no tema en presentarle a sus hijos a la persona con quien piensa mantener un compromiso serio y definido y no se alarme si no la aceptan en un primer momento, sólo basta con respeto y un buen trato.

Dese tiempo para sí mismo, nadie puede dar lo que no tiene, si usted no se da tiempo para sí mismo, no podrá recargarse de energía y vitalidad para ofrecérsela a sus hijos, tener a un padre feliz los mantendrá contentos y motivados para cualquier cosa que usted se proponga hacer con ellos. 
 
María Inés Gutiérrez Eguren
Psicóloga – C. Ps.P 6159
Terapeuta Familiar y de Parejas
migutierrez2008@gmail.com
Celular: 9949 0313
Consultorio: 719 0994

Madres Solteras


Madre y Padre a la vez... ¡Sí se puede! 

Son diversas las circunstancias que llevan hoy en día a las mujeres a enfrentar solas su maternidad. Puede que hayas enviudado y ahora te enfrentes sola frente al reto de reorganizar la casa a pesar del dolor que implica la pérdida de tu pareja; puede que estés atravesando por la separación o el divorcio y que tengas que sobreponer tus sentimientos a la nueva forma de vida entre tus hijos, tu y el padre de ellos; o puede que hayas planificado y decidido tener sola a tu hijo y enfrentar tu maternidad sin compartir y recibir el apoyo de la figura paterna.

Sea como sea, la decisión de enfrentar tu maternidad sin la pareja, implica muchas veces verte a solas sobrellevando la carga familiar, laboral, emocional, económica, social, y es ahí en donde se activa una de las fuerzas que te ayudará a sobrevivir: el amor hacia tus hijos, el cual contribuirá a desarrollar tu paciencia y tolerancia si es que aún no las has desarrollado. Existen diversos estudios en los que nos muestran que los hijos de madres solas por opción, son tan equilibrados como aquellos que provienen de hogares que tienen la presencia de ambos padres.

Ser madre soltera, es una realidad que se va dando continuamente en este nuevo siglo y a su vez es una tarea llena de cuidados, atenciones y responsabilidades que se deben afrontar de manera positiva de tal forma que llegue a ser exitosa y permita un íntegro desarrollo en tu hijo (a) y sobre todo en ti. Para ello deberás tener en cuenta las siguientes orientaciones que te ayudarán a sobrellevar y a fortalecer tu tarea de ser madre soltera:

Evita la sobreprotección; es uno de los errores más comunes que se comenten en la educación de los hijos o hijas. Ir más allá del cuidado y protección como una manera de compensar la falta de tiempos con los hijos y puede llevarte a estar muy pendiente de tal forma que no permitas que se desarrollen con autonomía y seguridad.

¿La mujer que todo lo puede?; pensar que puedes resolverlo todo tu sola, puede llevarte al estrés, confía en aquellas personas que estarían dispuestas a darte una mano, como tus padres, parientes, vecinas o amigas con las que puedas contar sin llegar al exceso de tal forma que te desentiendas de la responsabilidad que has asumido.

Construye un círculo social, de tal manera que puedas apoyarte cuando lo necesites, trata de conocer a personas que estén atravesando por tu misma situación, así no te sentirás sola y podrás compartir e intercambiar experiencias.

Ser perfeccionista, no ayuda, tratar de ser la mejor madre del mundo como una muestra de que no se necesita compartir la experiencia parental; sólo generará en ti fuertes sentimientos de frustración o ansiedad, interfiriendo en tu relación madre –hijo (a). Si una no se equivoca, no aprende la lección.

Prevé tiempos para ti misma, sé que es complejo darse tiempos para una sobre todo cuando tienes muchos pendientes por hacer, pero una de los beneficios de dedicarte un tiempo, aunque sólo sea de 5 a 10 minutos diarios para ti ayudarán a mejorar tus niveles de estima personal, así como el poder divertirte o disfrutar de alguna actividad mejorará tu estado de ánimo y por ende repercutirá en la relación con tus hijos(as).

Nuca dejes de superarte, los mejores logros muchas veces provienen de mujeres madres, que ven en la maternidad un reto para seguir adelante , llegar a cumplir sus sueños y metas y es una verdadera motivación para el éxito.

¿Qué debes decirle a tu hijo(a)?, es uno de los problemas a los que tendrás que afrontar, y al que muchas mujeres temen , la pregunta por la ausencia del padre será inevitable; enfrentar la realidad y decir la verdad te ayudará a tocar el tema con naturalidad. Para ello es recomendable tomando en cuenta la edad del niño(a), explicarle que existen familias como la suya en la que no convive el papá así lo tenga. A medida que el niño (a ) vaya creciendo y por el tipo de preguntas que haga como el querer saber de su padre, se aconseja que se hable de él dándole a entender la diversidad de tipos de familia y que la suya es una de ellas.

Consigue un empleo que te permita interactuar y establecer afectividad y cercanía con tu hijo y si no te permite el trabajo, trata de planificar tus tiempos y actividades de tal forma que puedas pasar tiempos de calidad con tu pequeño(a).

Pensar en poder rehacer tu vida, tómalo con calma , no te precipites , si te acabas de separar o divorciar, tómate tiempo para reestructurarte como mujer y como madre, no intentes reemplazar la figura paterna involucrándote rápidamente en una relación afectiva. El éxito de una nueva relación conlleva tiempos y una serie de adaptaciones para con tu hijo, para con la nueva pareja y para ti. Sé sincera contigo misma, no te precipites, las madres solteras sí pueden educar solas a sus hijos y tener resultados muy satisfactorios. 
 
Lic. María Inés Gutiérrez Eguren
Psicóloga – C. Ps.P. 6159
Terapeuta Familiar y de Parejas
migutierrez2008@gmail.com
Cel: 99949 0313
Of: 719 0994

¿Cómo controlar las pataletas de nuestros hijo (as)?


No entiendo ¡por qué se porta así!
 
¿Quién no ha presenciado alguna vez una rabieta infantil?, escuchar fuertemente los alaridos de un nene que se resiste a la negativa de la madre quien no accederá fácilmente a los caprichos del menor, pero, ¿qué sucede cuando en esta escena el que sale ganando no es el adulto sino el niño?
 
Las llamadas pataletas suelen presentarse durante los 3 primeros años de vida y se consideran como una característica común en niños de esta edad, sin embargo estas pueden persistir durante toda una vida; sólo nos basta con ver cómo algunos adultos aún hacen rabietas cuando se sienten frustrados o presionados por algo. Al igual que el adulto, en los niños las pataletas son una forma de expresar un descontento por algo que el niño no ha logrado hacer, conseguir o expresar y por lo tanto crea frustraciones.
 
Un niño puede frustrarse por diversas razones, podría ser porque los padres no prestan atención a lo que hace o dice ó porque se dio cuenta que es la forma de conseguir lo que quiere y se siente más fuerte que sus padres, ó porque no realiza bien algún juego que se propone y se irrita con facilidad, entre otros; por ello, considero importante conocer y aprender a reconocer qué es lo que nuestro hijo (a) trata de decir cuando expresa esa emoción o sentimiento de soledad, temor, frustración, desaliento, desesperación o desagrado frente a algo y lo expresa a través de la pataleta. Y como padres ¿qué podemos hacer?... Desesperarse, renegar, gritarlos, pegarles o ignorarlos sólo contribuiría a reforzar la rabieta como una forma de ganar su atención a aquellas expresiones de afecto o emoción que no logra reconocer o validar en sus hijos y de esta manera los niños aprenden a recibir estas respuestas negativas de usted a ser totalmente ignorados.
 
Si bien es cierto, es un momento de tensión para todos y cada uno de los miembros de la familia, inclusive, si está uno fuera de casa, las personas externas a la familia, siempre harán comentarios del tipo: “que malcriado ese niño”, ó estos padres no saben educar a sus hijos”, etc. Los padres suelen sentir vergüenza frente a ello y prefieren elegir soluciones inadecuadas para calmar la pataleta y no ser criticados por alguien externo. Muchas veces el niño que aprende esto de los padres volverá a realizar dicho comportamiento y conseguir alguna ganancia o beneficio para sí mismos.
 
Los comportamientos más comunes son: 
 
  • La búsqueda de la atención a través de no comer o empezar a llorar para que se esté pendiente de él. 
  • Luchas de poder cuando se niega a comer o acostarse por las noches, de esa manera el niño tantea cuáles son los límites. 
  • Búsquedas de venganza, si el niño siente que constantemente está en un situación de desventaja, puede manifestar frases vengativas como “te odio!! o “ya no te quiero!”. 
  • Hacerse el que no puede, generalmente sucede cuando los niños se sienten desalentados manifestando el no poder hacer nada de lo que se les presenta, queriendo que sean otros los que realicen dichas actividades. 
  
Aquí algunas sugerencias que pueden ayudarlos a manejar de manera más asertiva las pataletas:
 
 1. No pierda la calma y mantenga un mismo mensaje alineado, papá y mamá como equipo, si hay descalificaciones y desautorizaciones por cada uno de ustedes, el niño aprenderá a conseguirlo todo porque uno de sus padres actúa como su aliado.
  
2. Examine la efectividad del modelo que utiliza para calmar las rabietas de su hijo (a). No siempre lo que aprendimos con nuestros padres sirve siempre para resolver todos los comportamientos de ellos.
  
3. No sea permisivo, con la finalidad de “ignorar” el mal comportamiento muchas veces dejamos pasar alguna conducta inapropiada que el niño ha realizado, como por ejemplo pegarle a alguien o tirar las cosas, aprenda a corregirlo en el momento, en que realiza la conducta inadecuada.
  
4. No sea autoritario, lo cual no implica que deje de ser la autoridad en casa, pero llegar a ser implacable, no dejar alternativas y sólo imponer castigos, lo único que consigue es reforzar la conducta inapropiada del niño.
  
5. Utilice un enfoque más efectivo, cuando esté calmado, escúchelo, ayúdelo a expresarse , preguntándole si tiene miedo, si está cansado, si no desea, si no le gusta, etc. También puede funcionar el que lo distraiga cuando se presente una rabieta, si es un niño menor de 3 años, una vez que la frustración comienza hacia una actividad menos frustrante y atractiva. Si tiene más de tres años dele respuestas que él no se espera.
  
6. Dele siempre su atención y cuidado, pero sobre todo cuando su hijo (a) no lo espera ni se lo exija a través del mal comportamiento.
  
7. Busque orientación, a través de lecturas o visita a un especialista en el tema, de tal manera que pueda ayudarle a descubrir su propio estilo de regular las rabietas.
  
Tomemos en cuenta que no existen recetas ni soluciones mágicas y que cada niño y su familia es única y diferente; por esta razón es importante que logren descubrir sus propias tácticas y herramientas efectivas que les ayuden a enfrentar el mal comportamiento de sus hijos.
  
Ayuda mucho el que como padres podamos compartir algunas tácticas que nos sirvieron para manejar las rabietas de su hijo(a)… ¿podrías compartirlas?
  
Déjanos tus comentarios. ¡Muchas Gracias!
 
María Inés Gutiérrez Eguren
Psicóloga – C.Ps.P 6159
Terapeuta Familiar y de Parejas
Celular 99949 0313
Consultas 719 0994